Por| Cristian Alegría
Ciudad de México (Balance México 11 Septiembre 2025).-La explosión de una pipa de gas LP en el Puente de la Concordia, en Iztapalapa, ha dejado cinco personas muertas y 90 lesionadas, 23 de ellas en estado crítico. Más allá del saldo trágico, comenzaron a aparecer contradicciones sobre la situación legal y operativa de la empresa Transportadora SILZA, dueña de la unidad siniestrada.
En un comunicado, la compañía aseguró que la pipa operaba con pólizas vigentes de responsabilidad civil, daños a terceros, transportistas y protección ambiental. Sin embargo, la Agencia de Seguridad, Energía y Ambiente (ASEA) informó que no cuenta con registros recientes de seguros de responsabilidad civil ni por daño ambiental vinculados al semirremolque involucrado.
De acuerdo con la ASEA, la última póliza ligada a la Terminal Marítima Gas Tomza —de la cual salió cargada la unidad— venció el 12 de junio de 2025, sin que hasta la fecha exista una renovación. Incluso, precisó que la solicitud más reciente para registrar un seguro fue desechada.
Este contraste entre lo que sostiene SILZA y lo que reporta la autoridad federal abre cuestionamientos sobre el cumplimiento de las obligaciones legales de la empresa y sobre la eficacia de los mecanismos de supervisión en el transporte de gas LP, una actividad considerada de alto riesgo.
SILZA, parte de Grupo Tomza, expresó su pesar por el accidente y afirmó que mantiene contacto con aseguradoras para responder legal y socialmente. No obstante, la compañía no ha aclarado las discrepancias respecto a los registros oficiales.
La ASEA, en coordinación con la Fiscalía capitalina y la Comisión Nacional de Energía, inició las investigaciones para determinar las causas del accidente y anunció que aplicará sanciones si se confirman fallas atribuibles a la empresa.
El siniestro en Iztapalapa no solo dejó víctimas mortales y decenas de heridos; también destapó la falta de claridad entre lo que declara la empresa y lo que documentan las autoridades.
