Por | Damián Sánchez
Tapachula, Chiapas (Balance México 23 Mayo 2025).- Al sur mexicano, donde convergen culturas, historias y sueños, hay quienes ven en esta tierra un nuevo comienzo. Es el caso de Dailenys De La Caridad Valdés Calderón. llegó el 3 de diciembre con la esperanza como equipaje y un objetivo claro: construir un futuro con dignidad y pasión.

No fue fácil. Dailenys enfrentó los retos que implica llegar a un nuevo país, con costumbres distintas y un camino incierto. Pero nunca perdió la fe. “A los dos meses se dio la oportunidad y aquí estamos cumpliendo lo que me gusta”.
Junto al maestro Erol Manuel, otro apasionado del baile, fundaron Twins Dance Cuba, una academia que es más que un salón de clases: es un refugio de identidad caribeña. Salsa, bachata, merengue, urbano y zumba resuenan en cada paso que se enseña entre las paredes de la escuela ubicada en Séptima Calle Oriente, entre 9ª Avenida Norte y 13ª Norte.
Allí, cada clase es un puente entre Cuba y México, un espacio donde el cuerpo habla el idioma universal de la alegría.
Las clases pueden ser grupales, en pareja o completamente personalizadas. Lo importante, aseguran, es que cada alumno se sienta parte de esta familia en movimiento.
Dailenys no improvisa: cuenta con estudios en educación física. Su formación le ha permitido aplicar disciplina, técnica y empatía en cada sesión. Pero más allá del currículum, lo que contagia es su energía, su amor por el arte y su convicción de que sí se puede.
La historia de Twins Dance Cuba no es solo la de un negocio en crecimiento. Es el testimonio de cómo la fe, la constancia y la pasión pueden abrir puertas en los lugares más inesperados. En Tapachula, donde tantas historias comienzan o se reinventan, Dailenys ha demostrado que, incluso lejos de casa, los sueños pueden bailarse y cumplirse.