Tapachula, Chis. (Balance México 21 Julio 2025).-En Tapachula, como en muchas ciudades del país, la crisis de salud mental y adicciones ya no puede ser escondida bajo la alfombra. Es una realidad que camina, grita, duerme en las banquetas y a veces agrede. Una realidad que el ciudadano enfrenta cada día en los semáforos, en las esquinas y en los parques. Una realidad que la autoridad ignora con una pasmosa indiferencia.

En pleno siglo XXI, aún tratamos los trastornos mentales como un tabú o un asunto incómodo que es mejor no mirar. Y así, los pacientes psiquiátricos deambulan por las calles sin tratamiento, sin resguardo, sin atención. Algunos están fuera de control, otros en un estado lamentable de abandono, y lo más preocupante: muchos se han vuelto agresivos. Ya no es sólo un tema de salud pública, sino de seguridad.
A este panorama se suma otro grupo también invisibilizado: personas con adicciones al alcohol o a las drogas, quienes se han apropiado de semáforos y cruceros para pedir dinero, a veces con violencia, en lo que parece más un acto de intimidación que una petición voluntaria. Para muchos ciudadanos, el salir de casa se ha convertido en un reto de supervivencia emocional, donde la compasión choca con el miedo.
¿Y dónde están las instituciones, los programas de prevención, los centros de atención de adicciones? La omisión institucional ha permitido que esta problemática crezca como una bola de nieve, arrastrando con ella la tranquilidad de la ciudad y la dignidad de las personas afectadas.
También está el fenómeno de los limpia-parabrisas, que si bien en sus inicios fueron jóvenes migrantes buscando una moneda para comer, hoy muchos lo hacen para comprar una dosis. El consumo es visible, descarado, en las mismas calles. ¿Cuántas señales más necesita la autoridad para actuar?
Tapachula no puede seguir normalizando el caos, la marginalidad ni la desatención. Este no es solo un problema de imagen urbana, es una herida abierta en el tejido social que refleja el abandono de políticas públicas eficaces y humanas.
La salud mental y las adicciones deben dejar de ser un “tema pendiente” y convertirse en prioridad. Porque ninguna ciudad puede aspirar al desarrollo cuando su gente camina a la deriva, enferma, abandonada y sin un Estado que se haga responsable. La indiferencia no puede seguir siendo la política pública por defecto.
REFLECTORES
El Comité de Agua Potable y Alcantarillado de Tapachula (Coapatap), pondrá en marcha importantes estímulos económicos para beneficiar a la población usuaria, esto incluirá a madres solteras del hogar, personas de la tercera edad, así como todo aquel que tenga algún rasgo, lo que se busca es que se pongan al corriente con sus pagos.
Con las unidades nuevas que recientemente se hicieron entrega habrá mayor trabajo de los empleados de Coapatap, revisarán el tema de las fugas, verificarán el funcionamiento óptimo de los medidores de agua y detectarán en donde existen tomas clandestinas así también atenderán a personas que por alguna situación no pueden acudir a alguna sucursal para llevar a cabo trámites “aclaraciones”.
Nos leemos en la próxima…
Contacto: checha.informa@gmail.com